lunes, 1 de marzo de 2010

Tell me, princess, now when did you last let your heart decide?

Sábado, 27 de febrero

Nos teletransportamos a Lérida, rebotando con un alien en la carretera que hizo a mi padre tener que salir con el chalequito color subrayador amarillo. Llegamos y le damos mil mimitos a la bisabuela más mona de todas. Vamos al “concurso de carnaval del pueblo”. Ese que tu piensas, “vamos a ver cómo hacen el ridículo estos”. Y una vez llegas a la zona X, tienes que callar. No habré visto jamás un personal tan motivado. La idea es que las familias o collas de amigos se reunen para hacer carrozas arrastradas por TRACTORES (siempre dejando claro su lugar de origen). Las temáticas iban de Barbie (con un coche tuneado que les habría costado más de 100 euros la broma; Barbie embarazada es uno de los entes que podíamos encontrar en el grupo), Drag Queen (buenísimo… tuve que subir para hacerme una foto con ellos, y sus movimientos; esos bolsos plastificados que me llevaban…), Las Sirenitas (que implica que TODO el grupo iba de sirenita, incluidos TRES MACHOS sirenos, con su peluca y sus pechos de concha), los egipcios (estos me gustaron por el conductor, un viejito muy muy gordito y motivado que iba haciendo pasos de egipcio mientras conducía). También encontramos a dos disfrazados de vino tinto, Hello Kitty (realmente aterradoras), un cactus (me hizo demasiado gracia), un niño que iba de viejo y caminaba lentamente y jorobado (premio al mejor actor revelación), entre muchos otros. Bebito, tan pesado él con el “Barca” (Barça), pudo hacerse una foto con un maldito jugador ficticio. Hay que ver lo que tiene este niño con el futbol y la titita (pelotita).



Por la tarde, mientras esperaba esa entrada al mundo de las princesas, pude ver a luz del día qué tipo de público mayoritario había en la sala, esto es: NIÑAS vestidas de PRINCESA (jolín… y yo qué…), con sus padres, madres y otros compañeros. Justo llegar ya me topé con un grupito de cuatroañeras que chillaban histéricas PRINCEEESAS, PRINCEEESAS (y yo les hacía los coros mentalmente, con ganas de ponerme a dar saltitos como Heidy por toda la esplanada). También había las típicas parejas, en las que la chica arrastra y amenaza al novio por llevarlas. PUNTO. No había ningún tipo de público más. Te sientes tan marginado…

(Nota I: fue precioso pero por dios, que no me hagan más simples en un show, unos patinadores mundiales…)

(Nota II: por favor, madres, no dejéis a vuestras hijas de más de 7 años, sobretodo si la niña es muy grandota, que se pongan los trajes Disney... De pijamita, ¡que queda muy mono!, pero así así en público...)



Domingo, 28 de febrero

Me levanto a las 07.30, preparada para ir al Montseny con mi grupo de intrépidos amigos montañistas del Máster. Cuatro idiotas en un coche, empezando a las 8 horas a reir y parando a las 17.30 horas de la tarde. Qué dolor de abdominal. Yo no sabía que un paseo de mil horas por la montaña me iba a dar tanta risa. Momentos:


Encontrar palos y apalizar la nieve con ellos. Buscar personajes (tú eres John Locke, yo soy Kate porque así me lio con Sawyer –spoiler-, tú eres Doraemon porque… ¡porque mira que llevas cosas en la mochila! Y tú eres Dark Veider). Ver como F. saca una barra de pan y se la come tal cual para desayunar. Llegar a la primera cumbre y ver como F. saca UNA BOTELLA DE VINO y un vasito, para que brindásemos. A J. se le peta un Boli y le hacemos la coña del anticongelante. Va dejando marcas allá donde va, el muy Hansel. Nos cogemos de las manos y nos tiramos por una bajada llena de nieve hasta que nos caemos y empezamos a lanzar bolas de nieve. Encontramos un tronco y J. y Kate, osease yo, hacemos una lucha de palos, totalmente grabada para la posteridad. J. se cae mil veces y yo me río sonoramente en un 50% de ellas, y el otro 50% me lo guardo para mi interior. “Esto es difícil… mira, te voy a explicar una historia: era un montañista profesional que cayó y se rompió las vértebras y…”, “F., ¿me tienes que contar esto… AHORA?? Hombre sube a la segunda cuesta. Hombre se cae. Tortazo descomunalmente ridículo. “¿Estás bien?”, le dice la novia. “Sí”, y seguidamente suelta un infantil “AAAAAU”. No me puedo aguantar la risa. Me rio a modo tembleque. F. lo nota y se tira parte de su agua encima para que pudiera reir tranquila. Son muchas las veces que imito a Gandalf y sus “parte sin demora”. Bajamos usando el culo de trineo. “No debemos perder altitud”… “F., ¡¡pero si tenemos que bajar!!”. F. se duerme en el coche y no paramos de hacerle fotos y vídeos.



Qué de vida, la de los findes ajetreados

3 comentarios:

  1. Yo no me voy a meter con los tractores, porque en mi ciudad hay una fiesta en la que la gente saca sus carros tirados por caballos y se lían a dar vueltas al pueblo... (en teoría es el día del patrón de los animales, aunque yo creo que los animales estarían más contentos tumbaos a la bartola que no arrastrando carros, pero bueno, no me voy a poner a criticar tradiciones...)

    Hace algún tiempo igual te hubiese pedido foto de los Sirenitos, pero después de cierto grupo que vi yo disfrazadOs de "bailarinas con tutú", prefiero no volver a ver nada parecido...

    PD. Deja que Bebito se haga un culé de pro, ya desde pequeño, jajaja

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  2. joooo yo tambien qiero!!! parace muy chulo!! seguro qe es super chulo!!! claro tratandose de las princesas!!

    Y cuanta razon tienes con esse grupo perdido que acude a estas cosas porque les entusiama el mundo de las princesas, NY y yo tambien nos sentimos excluidas cuando fuimos a ver los cuentos favoritos de micky!

    LS

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  3. q chahi piruli!!!!

    un dia qedem i ens posem totes les pelis de princeses Disney, vale?? me pido ser la Bella!!! La pregunta es, q tal li va semblar al Sr.B el show??

    besitos!!!

    NY


    pd. estic plantejant de comprar-me una BlackBerry

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