jueves, 10 de septiembre de 2009

"Cut the boxes, not your hands". "Good tip, you should teach!"

Ayer me sentí abatida por el alma compulsiva de comprar libros.

Todos deberíais saber ya mi planning diario pero, para los fans descuidados, diré que de 12.30 a 13.30 (diez minutos arriba, diez minutos abajo; pero siempre a las 13.30 preparada para entrar en el laboratorio) me dispongo a comer mi Tupper (depende del día el plástico también. Y la tapa). Y sería un horario perfecto, si estuviera en américa ¿Cuál es el inconveniente? Muy bien, que no estoy en américa; por lo tanto me convierto irremediablemente en “la rarita”. Aquella que come sola a horas de guiri y la gente se detiene a mirarla cual mono de circo (¡¡cacahuetes, cacahuetes!!, que van muy bien de aperitivo). POR LO QUE he tenido que buscar alguna excusa que vaya acorde de una personalidad misteriosa y cosmopolita: formar un club de lectura unipersonal.


Claro que un club de lectura sin libros que todavía no me haya leído, no tiene mucha gracia. De momento estaba con el Sí de las niñas, pero es tan corto que no me da ni para un telediario. Así que ayer tuve que entrar en la ABACUS, aquel sitio donde a veces entro sólo para mirar libros y pensar que cuando sea rica tendré una librería como la de Bella y me pasearé por el piso encima de la escalera movible.


Grato error hablar por teléfono con mi muyamiga NY mientras me paseaba por los estantes: me cerraron la tienda. Pero lo gracioso fue que el pobre dependiente me tuvo que hacer señas de “vamos a cerrar (manos moviéndose y voz en susurro)” y yo asintiendo con un sutil movimiento de cabeza de “oh, vale, y yo aquí hablando”. Me cerraron las luces y me quedé con cara de “son las 19.10h y ya me cierran… esto no va a quedar así”. Y tan pancha me fui a otro ABACUS (me dan comisión si lo pongo en mayúscula).

Y, al entrar en AB II, me sentí como una estudiante escolar de nuevo. ¡Qué jolgorio de lotes de libros para el cole! ¡Si es que ni en el corte inglés! Se amontonaba la gente en la sección de bolis (recordadme que me tengo que comprar bics de colores), una pareja de hermanos enanos pegaban insistentemente un cartel informativo, chicas jugaban a pasar el código de barras por la santa maquinita, madres buscando carpesanos, colas y más colas para pagar…

Pero no me fui. Ahí estaba yo, toda chula, removiendo libros y objetos, moviéndome cual pez marino que esquiva las algas. Y al final encontré uno: El señor de las moscas (William Golding), que por el resumen no me dijo nada, hasta que leí la primera página (tradición: si no me gusta la primera página, mal vamos. Se puede descubrir mucho sobre el tipo de redacción con sólo unas primeras líneas).

El problema es que a mi me pones en una papelería y los ojos se me van, se me van. Y salí de allí con un archivador para mi muchas lecturas sobre el Experimento SAMP8junio09 y una agenda 09/10 para que no me despiste entre tanto ajetreo. Ah, eso, y mi santa bolsa de plástico de 15 céntimos.

Qué vida, la del Club de lectura

2 comentarios:

  1. A mí lo del club de lectura me suena muy americano, también, así que ya va acorde con lo de comer tan pronto. Que sí, que digo yo que aquí también los habrá, pero yo es que solo los he visto en las series.

    Eso sí, espero que no te dé por comentar los libros contigo misma (o al menos, que no lo hagas en público), porque entonces, lo de que se te queden mirando no será por estar comiendo antes de la una...

    ... um... vaya,ahora me apetecen cacahuetes...

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  2. ¿Club de lectura unipersonal? Vaya, empiezas ya como acabaste, ¡siendo muy peculiar, eh!

    Bueno, disculpa, lo primero después de tanto tiempo debería ser saludar: ¡holaaaaaa! Vale, sigamos.

    Dudas que surgen: ¿dónde te has metido en todo este tiempo? Bueno, y otras menos cotillas: ¿¿¿Ya estás cursando el doctorado??? Pero ¿tú como quien dice ayer no estabas empezando la carrera? :s

    Bueno, y ya respecto a la entrada, El señor de las moscas es muy duro, sólo te digo eso. Y muy recomendable también la peli, uff...

    Nada más, que ahora me toca cambiarte el enlace, grrr (es broma, jejeje).

    A ver cuánto te dura el entusiasmo :p

    ¡Muchos besos!

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